La Central de Información de Riesgos del Banco de España (CIRBE) es una base de datos que recoge la información de los préstamos, créditos (riesgo directo), avales y garantías (riesgo indirecto) que cada entidad de crédito mantiene con sus clientes.
Cuando solicitamos un préstamo, el banco tiene la obligación de evaluar nuestra solvencia y analizar la capacidad real que tenemos para devolver el dinero prestado. Para ello, siempre con nuestro conocimiento, los bancos solicitan a la CIRBE información sobre préstamos y créditos ya firmados con otras entidades.
Con este paso, se pretende evitar el sobreendeudamiento de los clientes y velar por la solvencia de las entidades.
La CIRBE ha actualizado su funcionamiento desde este mismo mes de enero, adoptando las modificaciones introducidas por la Orden ETD/699/2020. Estas modificaciones tienen como objetivo mejorar la información financiera para que las decisiones de concesión de préstamos se ajusten al perfil del cliente.
La citada orden, entre otras novedades, establece que:
- La CIRBE facilitará la información de las personas cuyo riesgo acumulado supere los 1.000 euros (este umbral se situaba antes en los 9.000 euros).
- Las entidades de pago y de dinero electrónico, incluidas las que operen en régimen de libre prestación de servicios, que realicen la actividad de concesión de crédito, deberán declarar a la CIRBE.
El Banco de España no tiene competencia respecto a las empresas de solvencia patrimonial y morosidad. Si tus datos han sido incluidos en alguno de los ficheros de alguna de éstas sin tu consentimiento, deberás dirigirte a la Agencia Española de Protección de Datos.