Si tienes una hipoteca con tipo de interés variable, la reciente subida de los tipos de interés no te habrá pasado desapercibida. El aumento de la cuota hipotecaria, junto al fuerte crecimiento de los precios, pueden hacer que tengas dificultades para llegar a fin de mes.
El Real Decreto-ley 19/2022, recién aprobado, contempla una serie de medidas para aliviar la carga de tu hipoteca si cumples determinados requisitos, que el sector bancario se ha comprometido a aplicar mediante su adhesión a dos códigos de buenas prácticas. Ten en cuenta que estas medidas solo afectan a las hipotecas sobre vivienda habitual y que solo podrás acogerte a ellas si cumples las siguientes condiciones:
- 1) Si tu hogar tiene una hipoteca sobre vivienda habitual cuyo precio de adquisición no exceda los 300.000 euros, una renta inferior a tres veces y media el IPREM* (es decir, 29.400 euros anuales previstos para 2023), una carga hipotecaria superior al 30 % de la renta y que, además, haya subido, al menos, un 20 %, podrás durante un plazo de dos años:
- Congelar la cuota hipotecaria durante 12 meses
- Cambiar el tipo variable por uno fijo
- Obtener un alargamiento del plazo del préstamo de hasta 7 años
- 2) Si tu renta es inferior a 25.200 euros al año (tres veces el IPREM) y dedicas más del 50 % de tu renta mensual al pago de la hipoteca y este esfuerzo se ha incrementado, puedes:
- Solicitar una carencia de 2 años
- Pagar un tipo de interés menor durante la carencia
- Obtener un alargamiento del plazo de hasta 7 años
Además, si el incremento de tu esfuerzo para pagar la hipoteca (parte de tu renta que dedicas a paga la cuota) es superior al 50 %, tu carencia podrá ser de 5 años, el tipo de interés durante el periodo de carencia será aún más bajo (Euribor menos 0,10%) y podrás ampliar el plazo de amortización hasta un total de 40 años desde la concesión.
En relación con la dación en pago, si el plan de reestructuración que solicitaste resultó inviable, se duplica a dos años el tiempo en que puedes obtener la dación en pago. Si tu plan resultó viable pero tienes dificultades para atender los pagos, también podrás cursar esta solicitud.
Además, puedes solicitar una segunda reestructuración si al terminar la carencia de la primera sigues en situación de vulnerabilidad.
Se introducen también medidas para reducir el coste de estas modificaciones de los contratos, como la exención del impuesto de Actos Jurídicos Documentados o un régimen específico para los gastos de notarios y registradores.
Las entidades tendrán que garantizar estos derechos incluso si han cedido tu crédito a terceros.
También es importante resaltar que, si no cumples las condiciones anteriores, puedes amortizar anticipadamente tu hipoteca o solicitar a tu banco cambiar el tipo de variable a fijo sin pago de comisiones durante todo 2023.
*El IPREM es el índice empleado en España como referencia para la concesión de ayudas, subvenciones o el subsidio de desempleo