El próximo Halloween será sin duda una fecha especial para muchas personas. Esta fiesta ha arraigado entre nosotros y nosotras y tras dos años de pandemia es de esperar un movimiento masivo de gente. En este sentido, lo primero que debemos recordar es que la pandemia no ha pasado y que debemos seguir observando las normas y tener precaución.
El disfraz define la fiesta de Halloween y para que sea un éxito y no tener un disgusto, además de la precaución en la fiesta recomendamos elegir el disfraz con cuidado:
- Los disfraces están confeccionados con materiales menos duraderos, o con retazos de otras ropas, por lo que se debe elegir siempre disfraces con materiales resistentes al fuego y que cumplan la normativa europea para lo cual hay que buscar el distintivo CE.
- Si se utilizan caretas son mejores las que no cubren toda la cabeza y hay que asegurarse de que tienen suficientes orificios para respirar.
- Hay que revisar la etiqueta y comprobar los materiales, así se evitarán alergias, rozamientos etc.
- En el caso de los maquillajes, es absolutamente necesario comprobar la caducidad y la composición del mismo para prevenir reacciones cutáneas incómodas.
Disfraces infantiles
- Los disfraces para personas menores de 14 años y mayores de 12 meses son juguetes y están sujetos a exigencias más rígidas. Siempre hay que comprobar la etiqueta y que el disfraz es el adecuado para la edad.
- Evitar las partes pequeñas del disfraz, como perlas o lentejuelas, que pueden desprenderse y se las pueden tragar.
- Evitar las cuerdas en capuchas o elementos en torno al cuello que puedan producir un ahogamiento involuntario.
- Tanto en maquillajes como tintes hay que cerciorase de que estos pueden ser limpiados con agua y ojo con las reacciones alérgicas y similares.
Kontsumobide recomienda acudir a establecimientos de cercanía y de confianza como una garantía adicional de seguridad. En caso de compras en línea, todas estas recomendaciones también deben ser observadas.
No hay que olvidar que en las compras por Internet hay 14 días para cambiar de opinión, siempre que no se haya utilizado o desembalado.