El Banco de España ha decidido comenzar a alertar a los consumidores de los riesgos que comportan los llamados préstamos revolving, aquellos que habitualmente se ofrecen a través de las tarjetas de crédito. Se trata de préstamos de baja cuantía y elevados tipos de interés que la banca ofrece para aplazar compras de bienes de consumo o como fórmula para obtener liquidez con rapidez. Aunque a menudo se presenta como una facilidad la posibilidad de devolver el dinero en pequeñas cuotas mensuales, el supervisor ha empezado a advertir desde su web de que esta operativa puede llegar a generar una deuda perpetua en la que solo se pagan intereses.
Para empezar, los préstamos ligados a tarjetas de crédito se conceden actualmente a un tipo de interés medio del 19,95% anual, lo que no es excepcional pues llevan oscilando entre el 19% y el 21% en la última década. Un alto coste que puede salir más caro aún de lo que ya parece. “En muchos casos, si la cuota elegida no cubre los intereses generados, la devolución puede demorarse ocasionando que la deuda crezca de tal manera que no pueda ser satisfecha con esta forma de pago”, avisa el supervisor en el portal web que ha creado para los clientes bancarios.
En dicha web, el Banco de España acaba de crear un simulador que permite a los consumidores conocer al detalle las consecuencias de cada crédito revolving en función de sus condiciones, revelando que unos euros de diferencia en la cuota pueden entrampar a un cliente de por vida. Por poner un ejemplo, un préstamo de 6.000 euros al tipo de medio actual, del 19,95%, costará 1.355,2 euros en intereses y se terminará de abonar en dos años si se devuelve con una cuota mensual de 300 euros. Si la cuota se rebaja a 150 euros, el préstamo tarda cinco años en pagarse y cuesta 3.939 euros en intereses. Y a partir de aquí, variaciones de unos pocos euros disparan la diferencia. Así, siempre según el simulador oficial, si la cuota es de 125 euros se pagarán ya más intereses que capital se ha solicitado prestado (6.125 euros) y se tardará ocho años en abonarlo. Y si la cuota es de 100 euros la deuda tardará 30 años en saldarse y para entonces se habrán pagado 30.337 euros en intereses. Cinco veces más que el tamaño del préstamo inicial. Más allá, si el pago al mes se rebaja a 95 euros, el Banco de España emite entonces una alerta que reza: “con esta cuota la deuda se convertirá en indefinida e incluso irá aumentando con el tiempo”.
“Cuando el importe de la cuota es igual a los intereses del periodo, la deuda viva permanecerá constante y si es inferior a los intereses, la deuda se irá incrementando en cada período por el importe en que los intereses excedan la deuda”, explica el supervisor. Estas alertas del Banco de España superan a las que ya venía haciendo, especialmente desde 2017, en cuyo mes de diciembre se alcanzó el máximo registrado de concesión de créditos revolving en 13.290 millones de euros.