Muy lejos de la alarma generada en Estados Unidos, el consumo de codeína y otros opioides como el tramadol y el fentanilo están generando algunos problemas de uso en España. La codeína es un derivado del opio que se utiliza en el tratamiento de la tos y que, combinado con otros analgésicos, es efectivo en el dolor agudo. En Estados Unidos y otros países, el consumo irresponsable se ha extendido en algunos ambientes jóvenes, especialmente ligados al mundo del rap, donde se mezcla con refrescos. En Catalunya se tiene constancia de 84 notificaciones de mal uso desde el 1 de julio de 2017. La cifra no inquieta especialmente a los profesionales de la salud, por considerarla muy alejada del consumo elevado de otros países.
Es más preocupante el consumo de opioides en personas adultas. Los expertos advierten de que el tramadol y el fentanilo están generando problemas. Su uso no está ligado a momentos de ocio sino al dolor crónico. Si las personas que lo consumen sufren alteraciones emocionales, hay más riesgo de caer en la adicción. El patrón se repite en mujeres adultas de más de 50 años que son tratadas con codeína por problemas de dolor. Las cifras en España no son alarmantes, nada que ver con la epidemia que está reduciendo la esperanza de vida de la población blanca estadounidense por primera vez en la historia, pero sí invitan a no bajar la guardia ante el poder de las farmacéuticas y reforzar el control de la prescripción y del acceso a los fármacos.